Movimiento por la Paz -MPDL-, Asamblea de Cooperación por la Paz (ACPP), Asociación Española de Investigación para la Paz (AIPAZ), Fundación Cultura de Paz, Consejo Federal Español del Movimiento Europeo – CFEME, Federación de asociaciones de defensa y promoción de los Derechos Humanos, Asociación Pro Derechos Humanos de España (APDHE), Plataforma del Tercer Sector, Fundipax, Unión General de Trabajadores y comisiones Obreras-CCOO
Los conflictos bélicos perviven en nuestro continente, una tierra que ha sufrido los más atroces impactos militares de las dos guerras mundiales, o las guerras en los Balcanes en los 90. Hoy, en 2022, Europa vuelve a revivir la crudeza e inhumanidad de una nueva guerra en Ucrania, que se añade a la inacabable guerra de Siria, de Yemen, de Libia…
La invasión de Ucrania tiene la responsabilidad del Gobierno de Rusia, liderado por Vladimir Putin, con los oligarcas que lo apoyan. Condenamos radicalmente la agresión militar a Ucrania. Condenamos radicalmente todas las agresiones militares. Ninguna razón puede justificar la invasión de un Estado soberano, vulnerando flagrantemente el Derecho Internacional. Es inadmisible la sumisión de un país y la anexión de un territorio por la fuerza de las armas y debemos elevar millones de voces para que Putin pare de inmediato su inadmisible acción militar.
Es el pueblo ucraniano en su conjunto el que está sufriendo esta guerra y se defiende de la agresión, con miles de personas muertas y heridas, con destrucción masiva de edificios, de infraestructuras, de hospitales y escuelas. Reclamamos que se reconozca el papel esencial de la Organización de Naciones Unidas, que tiene que ocupar un rol protagonista con el único objetivo de impulsar un proceso de Paz justo mediante la diplomacia.
Necesitamos construir puentes de seguridad y cooperación, poner los pilares del entendimiento, que permitan configurar un nuevo orden de paz. Igualmente consideramos que corresponde a la Unión Europea, que tiene entre sus principios fundacionales el mantenimiento de la paz, y no a la OTAN, la tarea de proporcionar mediadores internacionales para la solución de este conflicto. La UE debe erigirse como la mejor aliada de la paz y como actor principal en las negociaciones de las partes, siendo capaz de aportar soluciones que faciliten la desescalada del conflicto y que pongan en el centro de las decisiones los derechos y la seguridad humana de la población civil.
Por eso exigimos:
Hacemos un llamamiento al Gobierno español y a la Unión Europea a continuar con los esfuerzos para parar la guerra, redoblando la actividad diplomática, ampliando la ayuda humanitaria a todas las personas refugiadas y su reasentamiento en los países de acogida y por todo el tiempo que se necesite hasta que puedan volver en paz a sus hogares.
Esta no es la guerra de Rusia, sino del Gobierno autoritario ruso encabezado por Putin. Mientras un número creciente de la ciudadanía rusa clama en las calles por una desescalada bélica, el Gobierno está decidido a acallar todas las voces disidentes que sean críticas con la ofensiva militar y ya han sido arrestados más de 10.000 personas activistas y defensoras de la paz, pero las concentraciones en repulsa de la invasión siguen siendo masivas y por ello denunciamos la brutal represión de la protesta y de la libertad de expresión en Rusia.
No cesaremos de repetir que la paz es la única solución: el diálogo, la diplomacia, el objetivo de la paz siempre en el horizonte. Más allá de buscar otras responsabilidades en esta agresión militar, en este momento, consideramos que el futuro de la paz en Europa pasa por la seguridad compartida para todos sus pueblos y naciones, y por el enraizamiento de la Cultura de Paz en nuestras sociedades, una y mil veces comprobado que es la única forma que permite a las personas una vida digna y pacífica.
Nos movilizarnos como pacifistas, sabiendo que la paz no es solo la ausencia de guerra, sino la existencia de aquellas condiciones y acuerdos que disminuyen las amenazas y
aumentan el entendimiento entre países. No más muertes en nombre de banderas en las
guerras, no más sociedades sin presente y sin futuro por culpa de las violencias, ni en
Europa ni en ningún lugar del mundo. No más violaciones de Derechos Humanos, que es
lo único que traen las guerras.
¡NO A LA GUERRA DE PUTIN! ¡NO A LA GUERRA!